La historia de un festejo particular

Todos abrazan a Harry, que acaba de anotarle un tanto clave a Alumni (foto de Tribuna).

A la alegría por el triunfo y la clasificación a la final del campeonato, Harry Brouwer de Koning le sumó la felicidad de haber aportado un tanto clave en la llave ante Deportivo Independiente de Río Tercero.

El futbolista del Atlético Ascasubi señaló: “Me tocó marcar después de tanto tiempo. Pero más allá del gol, estoy contento por el equipo, porque volvimos a encontrar el juego y porque llegamos a una final más”.

A la hora de analizar al adversario de turno, explicó: “Tienen un equipo muy complejo, con jugadores muy experimentados. Pero pudimos aguantar y en el segundo tiempo lo pudimos manejar más (al partido)”.

“Cuando llegué al club, hablando con Isuardi, le dije que me diera un título. Me dijo que me iba a dar el Provincial y la Liga. Y yo esperaba que llegáramos ante Huracán de Tancacha, el rival de toda la vida”, agregó, en un deseo que se encamina a hacer realidad.

Consultado por el festejo del inflador cuando convirtió de cabeza, explicó: “Cuando era chico, siempre lo miraba al ´Piojo´ López. Era mi ídolo. Siempre festejé así los goles”.

Por su parte, Germán Boaglio analizó: “En el primer tiempo, nos manejaron la pelota en algunos pasajes. Pero en el segundo tiempo, fue todo nuestro y lo manejamos a nuestro placer”.

Haciendo referencia a la cuarta amonestación que acumuló hoy, el volante se quejó del fallo arbitral: “Abro los brazos para cubrir la pelota, me cobra falta y encima me saca una amarilla que me condiciona para las finales”.

En el otro camarín, el director técnico de Deportivo Independiente Juan Manuel López se mostró conforme con la actuación del equipo, a pesar de la eliminación.

“Al llegar los goles, deja una imagen clara de la superioridad en el marcador de Ascasubi como un finalista justo. Nosotros tuvimos una de Nahuel (Villafañe) y otras donde abortaron los intentos a un pase de llegar. Territorialmente y con la tenencia del balón, fue bueno lo nuestro”, consideró el entrenador.

“Esperábamos que el partido se hiciera largo y que en alguna jugada encontráramos el 1 a 0. Jugamos de manera muy digna y fuimos con mucha hidalguía”, añadió.

Asimismo, López remarcó la hombría de sus dirigidos: “Tengo un equipo con hombres que jugaron y se brindaron de la manera más noble. Tenía dos jugadores que dejaron de enterrar a la abuela por estar aquí en la cancha. Los hermanos Farías tuvieron anoche la desgracia de perder a su abuela y hoy estaban acá con los chicos. Más allá del resultado deportivo, me llenan los hombres con los que comparto este trabajo”.

Por último, abogó por un triunfo “palomero” en la definición del certamen: “Tienen que ganar los que son mejores. Ojalá salga campeón la Villa, que es el mejor”.

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